Durante la guerra civil española se hizo extensiva la práctica del bombardeo sobre poblaciones civiles, concretamente este año se cumplen 75 años del inicio de semejante práctica. Barcelona sufrió su primer bombardeo el 13 de febrero de 1.937, concretamente fue un bombardeo naval desde buque de guerra italiano.
.
Después de este vendrían unos 180 bombardeos más sobre la ciudad, la mayoría aéreos, que provocarían unas 2.750 victimas mortales. Barcelona no fue la única ciudad en sufrir esta mezquindad, Granollers, Badalona, Manresa, entres otras, también lo sufrieron.
.
Figura 1. Fotografía aérea del bombardeo de Barcelona del 17 de marzo de 1.938, tomada por uno de los aviones italianos participantes en el ataque. La tremenda explosión de la parte inferior de la toma corresponde al impacto sobre un camión cargado de explosivos en la Gran Via. Se puede observar la orientación Sur-Norte del bombardeo, con explosiones en el puerto y en el barrio del Raval. Imagen facilitada por Rodericus.
.
Frente esta situación las estaciones de metro que estaban en funcionamiento en aquellos años se emplearon como refugios. En concreto antes de finalizar el año 1936 se establecieron en ellas servicios de vigilancia nocturnos para poderlas emplear en tal fin.
.
A parte de emplear las estaciones como refugio, se construyeron del orden de 1.400 refugios en el subsuelo, además de instalarse un sistema de sirenas de aviso. También se instalaron baterías de defensa antiaérea en varios puntos de la ciudad.
.
Figura 2. Población refugiada en la estación de metro de Fontana.
.
Con el paso de los meses y de los bombardeos, el miedo calo en muchas personas que hicieron de los andenes de metro su vivienda, pudiéndose encontrar en ellos camas, colchones, sillas y utensilios para cocinar. Esta actitud se extendió hasta llegar a convertirse en un potencial problema de salud pública. Así, en La Vanguardia del día 1 de setiembre de 1938, se publicó una nota sobre “Normas para la utilización de las bocas y andenes de los metros como refugio” en las que se “invitaba” a todas las personas que habían ocupado los andenes al desalojo de los mismos amenazando con requisar las pertenencias de los que no lo hicieran.
.
Figura 3. Nota publicada en La Vanguardia debido al problema de la ocupación permanente de las estaciones de metro.
.
Este sentimiento tan humano de miedo convivió con otro igual de humano como la curiosidad, que en este caso trajo otro problema bien diferente. Y es que mucha gente alertada por las sirenas se dirigía a los accesos de las estaciones pero en vez de bajar a los andenes se quedaban mirando el cielo buscando los aviones, poniéndose en peligro y dificultando el acceso de gente más cauta. De nuevo en La Vanguardia, en este caso el día 24 de agosto de 1.938, podemos encontrar una nota de las autoridades reprochando semejante actitud.
.
Figura 4. Nota publicada en La Vanguardia debido del bloqueo de los accesos a las estaciones por curiosos en situaciones de alarma.
.
Desgraciadamente durante la contienda el empleo de estaciones de metro como refugio no se restringió a Barcelona, las estaciones de Madrid también tuvieron tal uso. Posteriormente con la Segunda Guerra Mundial les tocaría a las estaciones de Londres y Moscú entre otras.
.
Figura 5. Estación del metro de Londres empleada como refugio durante la Segunda Guerra Mundial.
.
Figura 6. Estación del metro de Moscú empleada como refugio durante la Segunda Guerra Mundial.
.
Tristemente el empleo de estaciones de metro como refugio no es algo pasado, actualmente existen metros en proyecto y construcción en los que se tiene en cuenta este uso y se construyen previéndolo. Un ejemplo de ello es el futuro metro de Tel Aviv.
.
En la próxima entrada veremos algunas otras alteraciones que provoco la guerra civil en el metro de Barcelona.
.
Si algún lector está interesado en el tema de los refugios antiaéreos puede consultar el blog de Josep Maria Contel. Es muy intetesante.